
CIUDAD DE MÉXICO, 15 de diciembre.-El cardenal Norberto Rivera Carrera, destacó que a la Iglesia Católica no le compete evaluar el papel del gobierno mexicano contra el crimen y la violencia, pero tampoco debe ser ajena a enfrentar el problema y denunciarlo.
Aprovechó el momento para acusar nulos avances en la investigación de denuncia que la Arquidiócesis Primada de México levantó después de que vía telefónica sujetos intentaran extorsionar a sus seminaristas, identificándose como la Familia Michoacana.
La extorsión es un delito que tiene que combatir la ciudadanía, y en primer lugar denunciar. Muchas veces es por miedo, otras veces es por una falsa prudencia, otras veces se ve desalentada porque no ha tenido efecto la denuncia, como la que en otra ocasión hice, etcétera, pero debe evitarse ese mal que está cundiendo tanto a en nuestra ciudad", indicó.
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