En la cinta, dirigida por Rawson Marshall Thurber, Aniston da vida a Rose O’Reilly, una chica que sobrevive bailando como streaper.
NUEVA YORK, 5 de septiembre.- El hombre es un ser que, por su naturaleza, ha evolucionado viviendo en familia. Este comportamiento se replica en diferentes ámbitos, donde las personas, en ocasiones, pasan más tiempo con otras personas que con su propia familia sanguínea... y la actuación no es la excepción.
Para Jennifer Aniston y Jason Sudeikis, quienes encabezan a una familia improvisada en la cinta ¿Quién*&$%! son los Miller?, que se estrena en México el viernes, esa acción de crear empatía con un equipo de trabajo formado por desconocidos y que al final del proyecto pareciera ser una familia, no es nada extraño.
“Pienso que en realidad nos convertimos en una familia. Pasas cuatro meses de tu vida compartiendo durante casi las 24 horas del día con las mismas personas, todos los días... en ocasiones te das cuenta que es mucho tiempo y que durante éste a las únicas personas que tienes son a tus compañeros de trabajo”, reflexionó Aniston durante una conferencia en Nueva York.
“Es el modelo real de un show: pones a un grupo de personas en el mismo pueblo a la mitad de Carolina del Norte durante cuatro meses, les das trabajo —y nosotros no estábamos en una tienda de playeras, estábamos haciendo una película—, y al final terminan todos queriéndose, gustándose y molestándose, exactamente por lo mismo que pasan los personajes en la película”, agregó Sudeikis.
En la cinta, dirigida por Rawson Marshall Thurber, Aniston da vida a Rose O’Reilly, una chica que sobrevive bailando como streaper y por una situación económica complicada acepta la propuesta de su vecino David Clark (Sudeikis) de fingir ser su esposa e ir a la frontera mexicana a buscar un cargamento de mariguana para su proveedor.
“El tono de la película es juguetón y cómico, situaciones como ésta, que se vive en la frontera y tragedias hay en todo el mundo, así que lo que tratamos de hacer fue mantenernos enfocados en lo que queríamos hacer con esta cinta”, apuntó Sudeikis.
Si bien el filme, en el que también actúan Emma Roberts (quien personifica a Casey, la típica adolescente que huye de casa), Will Poulter (Kenny, el chico al que su madre no le hace caso), Nick Offerman (Don, el agente) , Kathryn Hahn (Edie, la ama de casa) y Ed Helms (el proveedor de David) refleja el problema real del narcotráfico que a diario se vive en la frontera entre Estados Unidos y México, el director hizo que el tono de comedia se mantuviera tanto fuera como dentro del set.
“Es una manera diferente de hacer una comedia en esta década, tratamos de mantener los ojos en el camino que queríamos seguir y al hacerla… divertirnos. Trabajar con todos ellos fue verdaderamente fácil para mí. Creo que la clave de la cinta estaba en poner un grupo de actores que pueden asesinar al público con risas y dejarlos hacer su trabajo, son personas que admiro muchísimo y que he visto cómo conectan un home run tras otro en sus trabajos.
Hacer una película de comedia es una cosa, pero el momento es cuando la editas y tienes las risas. Cuando pones el resultado final frente al público te das cuenta de qué es lo que funciona y lo que no, entonces sacas y dejas secuencias enteras, pero sin duda lo más divertido es lo que está en la película”, agregó Thurber.
Una lección de cómo aprender a besar, impartida entre dos chicas a un chico, la estafa de dos toneladas de mariguana a un cártel mexicano, las consecuencias de una mordida de tarántula, un bebé que no existe y el baile de una streaper profesional para poder huir, son sólo algunos de los elementos que conforman ¿Quién *&$%!son los Miller?
Sin embargo, actuar como nudista fue, sin duda, lo que más trabajo le costó a Jennifer Aniston, prometida de Justin Theroux.
“Pienso que Rose es una chica triste que ha sido decepcionada tantas veces en su vida que tiene que construir una barrera exterior para protegerse. Ella, me parece, transforma esa tristeza en rabia. Trabajé mucho para esa secuencia, tuve un coreógrafo increíble, que me enseñó algunos movimientos muy locos y poco a poco se volvió sencillo hacerlos, pero sobre todo, divertido. Ahora tengo un tubo en mi propia casa.
“Cuando la cámara comenzó a rodar fue un poco incómodo para mí, porque hice todos los ensayos sólo con Denis (el coreógrafo) y, de pronto, te encuentras en el set con tres cámaras rodando y un montón de gente alrededor, pero al final simplemente lo hice y quedó muy bien”, concluyó la actriz.
hch
