ZÚRICH, 4 de septiembre.- Al respecto del traspaso del galés Gareth Bale al Real Madrid, el suizo Joseph
Blatter, presidente de la FIFA, no cree que un jugador valga 100 millones de euros, aunque entiende que se trata de una cuestión del mercado en la que no puede intervenir.
Dudo que un jugador valga realmente tanto. Lo dudo, pero no puedo detener su fichaje son cuestiones ajenas”, expresó.
El cuadro merengue pagó poco más de 90 millones de euros por el ex jugador del Tottenham, aunque en el Reino Unido la cifra ofrecida se aumenta hasta cerca de los 100 millones, lo que lo convertiría en la transacción más cara de la historia.
“Muchos podrían decir que el país es pobre y está endeudado, pero en el futbol siempre se encuentra dinero. Es el mercado el que establece el precio y nosotros no podemos intervenir”.
Además, el máximo mandatario de la FIFA recordó una polémica similar con el precio del brasileño Ronaldo cuando pasó del Inter de Milán al Real Madrid en 2002: “Al mismo tiempo, surgió una subasta en Sothebys en Londres, donde se vendió un cuadro de Picasso del periodo azul por más de 59 millones de euros. Era el mismo valor”.
En ese sentido, Blatter hizo una comparación entre la utilidad del cuadro vendido y la de un futbolista, que es contratado por uno de los clubes más ganadores de Europa.
“Entonces dije: el hombre que adquirió este cuadro lo pondrá en algún circuito cerrado, ya que tiene el riesgo de perderlo. Pero a Ronaldo lo verán dos veces por semana en un estadio”, bromeó.
Por otra parte, el suizo expresó su tristeza por la muerte del ex portero de la Real Sociedad, Ignacio Eizaguirre, fallecido la pasada semana en San Sebastián a los 92 años.
“Es con gran pesar que le escribo estas líneas tras conocer la triste noticia del fallecimiento de quien fuera uno de los guardametas en el Mundial de Brasil de 1950”, apuntó Blatter en la carta enviada a Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Futbol (RFEF).
Poder económico
Los equipos de la Liga Premier inglesa gastaron 630 millones de libras (980 millones de dólares), de los que 490 (760 millones de dólares) terminaron en cuentas de equipos del extranjero.
El poder económico de los clubes ingleses se ha visto fortalecido por los nuevos contratos de televisión, que generarán más de ocho mil 500 millones de dólares en los tres próximos años.
De esta forma, las franquicias de la Premier gastaron unos 140 millones de libras (218 millones de dólares) sólo en el último día del mercado, incluyendo los 50 millones de euros (66 millones de dólares) que el Arsenal desembolsó para contratar al volante del Real Madrid, Mesut Özil, una cifra récord para el equipo inglés.
Un caso similar también ocurre con el Manchester City, propiedad del jeque Mansoru Bin Zayed, que gracias a millones de petrodólares ha conformado un equipo de primera línea para la actual temporada.
