
Gilbert hizo un llamado al público para que apoye más el teatro mexicano y acuda desde sus primeras funciones, pues son las que mantienen vivas las temporadas de las obras. Además negó una crisis en sus producciones.
CIUDAD DE MÉXICO, 14 de agosto.- La costumbre que el público había adquirido de asistir al Centro Cultural Telmex para ver obras musicales del mundo, pero con talento nacional, llegó a su fin, o por lo menos tendrá una larga pausa. Después de 14 años y 19 obras de gran formato el recinto dejará de ser el espacio principal de estos montajes, tras finalizar la temporada de Mary Poppins.
Sin embargo, los dos teatros ubicados en la esquina de las avenidas Cuauhtémoc y Chapultepec, en la colonia Roma del DF, no cerrarán sus puertas, ni serán derrumbados como se especulaba.
Simplemente cerrarán sus puertas hasta que lleguen otros shows; incluso el Teatro II ya anuncia Soap, espectáculo estranjero de acrobacia, que iniciará el 1 de octubre. Los productores teatrales Morris Gilbert y Federico González Compeán decidieron enfrentarse a un doble estreno el 17 de octubre: el del musical Wicked, uno de los más costosos que ha llegado a México, y el de un nuevo espacio escénico de mil 400 butacas en el sótano de Plaza Carso, que hasta el momento no les ha sido entregado, sino hasta la semana entrante, pero que ahora será el recinto principal para sus próximos montajes.
“No existe ninguna crisis, sino un deseo de mejorar. Sentimos que había muchos impedimentos para que la gente acudiera al Telmex en las cantidades que se requiere para mantener producciones de esta calidad.
Obras como Mary Poppins o Los miserables tienen costos monstruosos que requieren de una afluencia muy alta, necesitamos operar a un 70 u 80 por ciento de capacidad para que el negocio sea redituable, viable, y la ubicación de los teatros es vital para que esto suceda. Así que las probabilidades de que pase son más altas en Polanco que en la colonia Doctores (sic) y se dieron las cosas. Se terminó un ciclo”, enfatizó Gilbert en entrevista con Excélsior.
La División de Ocesa Teatro se mudará a la zona de Polanco, incluyendo oficinas administrativas, que estarán a las afueras del recinto, en el área aledaña a Plaza Carso, así como los salones de ensayos. El teatro sólo contará con una oficina de producción para las necesidades de la obra.
“La razón de elegir este nuevo teatro es que en la vida todo evoluciona, nada permanece, todo cambia. Así que después de 14 años en el Telmex, sentimos que ya era hora de evolucionar, porque aunque hemos sido muy felices ahí y hemos hecho muchas cosas lindísimas, era momento de cambiar.
Los cambios son sanos, necesarios y ésta era una oportunidad que debíamos aprovechar: un teatro en el corazón de Polanco, nuevo, con mil 400 localidades. Ahí estaba el teatro, hace años que lo venían construyendo, se dieron las circunstancias, Ocesa lo pudo tomar y tiene todo el sentido”, señaló Morris Gilbert.
La nostalgia es inevitable para quienes asistieron alguna vez a los Telmex para ver obras en español, de alta calidad y con talento mexicano: Rent, El fantasma de laópera, El hombre de la mancha, Jesucristo Super Estrella, Chicago, El Full Monty, Los miserables, José el soñador, Violinista enel tejado, Hoy no me puedo levantar, Bésame mucho, Los productores, La Bella y la Bestia, DulceCaridad, Mamma mía!, La líneadel coro, Peter Pan, Si nos dejan o, la más reciente, Mary Poppins. El Teatro I, con el doble de localidades —dos mil aproximadamente— fue casa del talento mexicano en estas diferentes historias.
“Realmente en el mundo, en general, los teatros de comedia musical son de mil 200 a mil 500 localidades. El Teatro Telmex I, del que jamás hablaré mal porque fue nuestra casa durante 14 años y le tengo todo el cariño del mundo, es un lugar que resulta muy grande para la comedia musical.
“El elemento básico para que el teatro funcione es la ubicación y evidentemente es mejor la que tiene un teatro en Polanco, pensamos que es más adecuada para este tipo de musicales”, destacó.
Aclaró que la relación con el Centro Cultural Telmex fue comercial y quedó en términos cordiales. Hasta el 17 de octubre, que se estrene Wicked en el Teatro de Plaza Carso, este musical aún usará los salones de ensayos del Teatro I para su montaje.
Éstas áreas fueron acondicionadas por los productores para las necesidades del teatro. Es por ello que Gilbert no se preocupa por empezar de nuevo, en la adaptación de un nuevo espacio. “Estamos haciendo exactamente lo mismo: vamos a encontrar los espacios adecuados para salir adelante. Wicked lo ensayaremos en el Telmex, se hará el montaje y veremos más adelante.
Esperamos que este musical sea el enorme éxito que anhelamos, queremos, nos merecemos y necesitamos, después Dios dirá. Tenemos la emoción y la responsabilidad de abrir un teatro nuevo, es un compromiso y espero que salgamos con altos honores.”
Gilbert hizo un llamado al público para que apoye más el teatro mexicano y acuda desde sus primeras funciones, pues son las que mantienen vivas las temporadas de las obras. Además negó una crisis en sus producciones.
“Estas tres últimas semanas en el Telmex, cuando anunciamos que Mary Poppins finalizaba, tuvimos agotadas todas las funciones, es decir, cada obra tiene su público y todo es relativo. Si la gente quiere ir va. Yo que más quisiera que el teatro en México creciera de tal manera que pudiéramos tener diez musicales en cartelera, pero eso depende del público más que de nosotros.
“Si cuando estrenemos Wicked se llena todas las noches y tenemos localidades agotadas para siete meses puedo asegurar que montaremos otros cinco. El público nos tiene que apoyar, porque se tardan mucho en venir, no tienen sentido de la urgencia. De lo que no se dan cuenta es que si no van hoy, es muy probable que no vayan a estar ahí mañana”, concluyó.
hch

