CIUDAD DE MÉXICO, 22 de junio.- A sus 28 años Megan Fox dejó claro que puede ser el sexy symbol de Hollywood, pero en su casa es una madre estricta que no permitirá que en la educación de sus dos hijas, la mayor Noah de dos años y la pequeña Bodhi de apenas cuatro meses, existan la menor exposición a los más populares aparatos electrónicos.
La actriz advirtió que encuentra a la televisión como un medio abrumador, especialmente por la publicidad y porque considera que se pierde mucho tiempo frente al televisor.
"Mi idea es tenerlos alejados de la televisión el mayor tiempo posible, o utilizar alguna herramienta que evite tanta publicidad.
"Mi objetivo es que no utilicen computadoras, ni teléfonos móviles al menos hasta el octavo grado", aseguró Megan.
Además reveló a la revista Parents que ahora pasa por una etapa en la que va a intentar pasar más tiempo en Los Ángeles para estar al lados de sus hijas.
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