NUEVA DELHI, 18 de mayo.— Manmohan Singh dimitió ayer al cargo de primer ministro tras la aplastante derrota sufrida por el gobernante Partido del Congreso en las elecciones generales, en las que perdió el poder ante el nacionalista hindú Narendra Modi.
Singh reconoció la victoria del opositor Partido Bharatiya Janata (BJP) en las elecciones anticipadas, que logró la mayoría absoluta, y deseó al gobierno entrante “todo el éxito posible”, citó la cadena nacional NDTV.
Singh compareció por última vez ante la nación para pedir “respeto al juicio emitido por los votantes”, antes de reunirse con el presidente Pranab Mukherjee para entregarle su renuncia, tras dos mandatos consecutivos.
El Partido del Congreso abandona así el poder tras una catástrofe electoral sin precedente, al obtener el peor resultado de su historia con un máximo de 44 escaños, 162 asientos menos que en 2009.
Narendra Modi, líder del Partido Bharatiya Janata, ha infligido al gobernante Partido del Congreso de la dinastía Nehru-Gandhi su peor derrota electoral.
Modi logró una aplastante victoria en las elecciones generales de India, al alcanzar al menos 278 de los 543 escaños que forman el Parlamento, lo que le permitirá gobernar con mayoría absoluta.
El BJP gobernará sin necesidad de coaliciones al superar 50 por ciento de los escaños, algo que no se producía en India desde los comicios ganados en 1984 por Rajiv Gandhi tras el asesinato de su madre Indira, ocasión en la que el Congreso obtuvo 415 asientos.
Por otra parte, Narendra Modi, fue recibido ayer como un héroe en la capital Nueva Delhi y en la ciudad sagrada hindú de Varanasi, un día después de su rotunda victoria en las elecciones parlamentarias.
Miles de simpatizantes del partido nacionalista hindú BJP salieron ayer a las calles de Nueva Delhi para recibirlo.
La multitud bailaba y se arremolinaba al ritmo de improvisadas melodías, lanzando pétalos de flores al paso de Modi y ondeando banderas con el símbolo del BJP, la flor de loto. “El loto ha florecido en Delhi”, exclamó Modi, mientras sus dedos dibujaban la V de la victoria.
Posteriormente, Modi se reunió en la sede del BJP con la cúpula del partido para debatir, entre otros asuntos, sobre los puestos ministeriales. “Hemos obtenido un mandato vigoroso para gobernar”, dijo el presidente del partido, Rajnath Singh.
Según los resultados provisionales emitidos por la comisión electoral, el BJP consiguió diez escaños parlamentarios más de los necesarios para la mayoría absoluta.
“Prometemos construir una India fuerte, que exija respeto y que no dependa de la ayuda exterior”, dijo el presidente del partido. Aún no se ha fijado la fecha en la que se llevará a cabo la investidura de Modi, que tras alabar el “entusiasmo de los votantes” partió rumbo a Varanasi.
En la ciudad sagrada hindú, Modi celebró la victoria del BJP. “No hay oposición. Por primera vez tendrán que integrar una coalición para formar una oposición”.
